Masonería en la Revolución de Mayo: Influencia en el pensamiento político
Ricardo Romero, Emilio Corbière, Nicolás Breglia, Jorge Cabezas, Sylvia Ruz Moreno, Antonio Las Heras, Andra Marisa Romandetti Dasso, Mario Luján Benitez Reyes, Verónica Baston, Tamara Le Gorlois, Germán Boure y María del Carmen Romanotambaleo de los modelos de gobernabilidad imperantes y afianzados desde
comienzos de la Modernidad. El Iluminismo y la Ilustración se presentan
como el movimiento de ideas que especula y fundamenta la filosofía de la
política que avalará el acceso al poder de los “comunes”. Acceso que, en el
plano económico, ya se encontraba con vigor y en pleno derecho. La
irrupción de la burguesía como actor de este proceso reclama nuevos y
distintos espacios de poder político antagónicos a aquel en vigencia. Nuevos
paradigmas, libertad e igualdad, se propondrán entonces como el horizonte a
elaborar mediante la herramienta de la razón. En este contexto surgen
concepciones, modelos de orden y nociones de estado, alternativos y
opuestos al modelo de monarquía absoluta que, para entonces, se encuentra
agotado, así como al poder teocrático que lo sostenía.
A comienzos del S XVIII, la masonería se instituye como tal con las
llamadas Constituciones de Anderson, las cuales les da a la organización un
criterio y sistematización que tendrá gran influencia en todas las logias
llamadas regulares hasta nuestro tiempo. En uno de sus puntos
fundamentales, estas Constituciones, describen cuales son los límites de
quienes pueden ser o no masones, es decir la aceptación de sus miembros. Si
bien esta sociedad iniciática se origina en los gremios de constructores
medioevales, los cuales basaban su libertad social en función de la no
divulgación de su conocimiento, es a partir de la consolidación de la
normativa constituida por Anderson donde se establece la aceptación de
integrantes de otros ámbitos sociales o culturales.